Latin American Writers and the Crisis in Spain (Spanish Text)
by Horacio Castellanos Moya / March 14, 2013 / No comments
La profunda crisis económica y social que padece España abre una nueva situación para la publicación y difusión de la literatura latinoamericana. Durante las últimas décadas, gracias al apogeo de su economía, Barcelona y Madrid venían funcionando como capitales de la vida literaria para los escritores en lengua castellana, tanto españoles como latinoamericanos. Pero la drástica reducción del mercado en la península y el abrupto recorte de los presupuestos dedicados a la cultura, y a la literatura en particular, pueden modificar la condición de metrópolis literarias que tenían las ciudades españolas.
- Corkscrew is focused on Latin American issues. Literature, journalism and politics are the main concerns of this column. A corkscrew is useful only if it opens a bottle, hopefully full of something that would enlighten our spirits, but we could also set loose a cruel Genie or a rotten wine. The author will follow this principle: look for topics that open debates, new perspectives, and controversy. Cheers!
- Horacio Castellanos Moya is a writer and a journalist from El Salvador. For two decades he worked as a journalist in Mexico, Guatemala, and his own country. He has published ten novels, five short story collections and two books of essays. He was granted residencies in a program supported by the Frankfurt International Book Fair (2004-2006) and at City of Asylum/Pittsburgh (2006-2008). In 2009, he was a guest researcher at the University of Tokyo. Currently he teaches at the University of Iowa.
La idea de que en cada lengua exista una ciudad generadora del prestigio literario ha sido motivo de debate y cuestionamiento. Sin embargo, no es difícil comprenderla: Nueva York, y antes Londres, han sido La Meca para los escritores de habla inglesa. Por muy genial que sea un escritor procedente de Australia o Sudáfrica, por ejemplo, su obra tendría que remontar un difícil cerco regional si no es reconocida por las editoriales y la crítica en las metrópolis antes mencionadas.
En el caso de la lengua castellana, sin embargo, las ciudades españolas no siempre fueron las generadoras de prestigio. A lo largo del siglo XX, y en especial a causa de la dictadura de Francisco Franco y de la pobreza que vivió España bajo su mandato, otras ciudades latinoamericanas jugaron ese papel. Buenos Aires lo cumplió hasta mediados de la década de los 70’s, cuando los militares acabaron con la mayor parte de la vida literaria. Las principales casas editoriales con difusión continental estaban allá; la gran mayoría de traducciones de la literatura internacional procedían de esa ciudad. El grupo de escritores aglutinados alrededor de la revista Sur marcaban pautas de gusto, pero la producción y difusión de libros era rica y diversa. No es una coincidencia que los narradores y premios Nobel Miguel Ángel Asturias y Gabriel García Márquez hayan difundido originalmente su obra fundamental desde el Río de la Plata.
Paralelamente, al calor de la revolución y gracias a la fundación de editoriales, de la revista Casa de las Américas y de sus premios literarios, La Habana se convirtió en el centro donde se canonizaba a los escritores con ideas progresistas y de cambio social. Sin embargo, este rol no duró más de una década: en 1971, con la detención del poeta Heberto Padilla, el prestigio hizo aguas y terminó de hundirse con el propio modelo dictatorial cubano.
La Ciudad de México también ha tenido un papel relevante como referente de prestigio y difusión literaria a nivel continental. Su entorno literario se enriqueció, primero, con la llegada de editores y escritores españoles expulsado por Franco, y luego, a partir de mediados de los 70’s, cuando las dictaduras del Cono Sur mandaron al exilio a escritores e intelectuales. La revista Vuelta, liderada por el poeta y Premio Nobel Octavio Paz, fue determinante en ese periodo, no sólo para la literatura en lengua castellana sino a nivel internacional.
Ahora bien, si Madrid y Barcelona dejaran de ser los referentes de prestigio literario para los escritores latinoamericanos, ¿qué es lo que sigue? ¿Desde dónde se dictarían los criterios del gusto? ¿Volverían a una ciudad latinoamericana? Es pronto para saberlo. Lo cierto es que un cambio en este ámbito sólo sucedería si se produce una fractura importante en la industria editorial en lengua castellana. Pero eso lo abordaré en mi próxima columna.